domingo, abril 17

BALAITUS, GLACIAR DE LAS NEUS, Sabado 16 de abril

Una actividad 10 para un día 10!!! Yo ya he añadido esta actividad a mi lista personal de actividades perfectas del pirineo, creo que Alberto también. Todo ha ido sobre ruedas y hemos disfrutado a tope del fin de semana.
Quedamos en Argeles-Gazost por la tarde. Alberto venía desde Bilbao y yo desde Villanua. Nos dirigimos al punto de salida en Arrens-Marsous ya en un solo coche. Preparamos los mochilones y nos pusimos en marcha en busca del refugio Ledourmeur donde pasaríamos la noche.
Pasamos primero el lago Suyen donde dejamos a un lado el desvío al refugio de Larribet. Seguimos recorriendo el valle hasta un llano, Labassa, donde veíamos ya el desvío a coger para acceder al refugio.
Hasta aquí se ganaba el desnivel poco a poco pero a partir de este punto la cosa cambia. Giramos a la derecha y atacamos la cuesta que nos deja en el refugio.
El refugio de Ledourmeur no está guardado, tiene unas 12 plazas y está muy bien cuidado. Por tener tiene hasta luz , ya que dispone de placas solares. Mucha comodidad. Pensábamos que estaríamos solos pero pronto empezó a llegar gente.
Pronto por la mañana comenzamos la ascensión. Enseguida nos pusimos los esquis. Unas primeras rampas nos dejan en un llano donde podemos ver ya la barrera rocosa de Costerillou.
La nieve estaba muy dura y tuvimos que superar unas rampas muy pendientes para poder acceder al glaciar de las Neus, donde el sol se hacía fuerte y reblandecía la nieve a nuestro favor.
Una buena parada para reponer fuerzas e hidratarnos un poco. Empezamos poco a poco ganado altura por las largas pendientes que llevan hasta la base del Balaitus. El sol nos hizo sudar tinta china. Por fin llegábamos a la base del corredor que da acceso a la cima. Pudimos verlo de frente durante un rato y lo analizamos bien antes de entrar. Dejamos los esquis y nos preparamos con calma para afrontar el corredor.
El corredor tiene un resalte al inicio. Se trata de un resalte de hielo de unos 10 metros. El hielo estaba en perfectas condiciones. Pudimos pasar con facilidad, eso sí, de bajada echamos un rapel de 25 metros para evitarnos problemas de última hora.
A partir de este punto el corredor es totalmente de nieve. Una buena huella nos facilita la progresión y avanzamos con bastante rapidez.
El corredor desemboca en la misma cima, característica por el trípode que hay en ella. Disfrutamos durante un rato de la ascensión tan buena que acabamos de hacer, aunque el descenso implica mucha concentración hasta llegar de nuevo a los esquis. La esquiada y la nieve fueron perfectas.
ACTIVIDAD 10 PARA UN DÍA 10!!!